lunes, 7 de junio de 2010
ARMANDO EL CUBO RUBIK
“Save The World - Solve The Puzzle”
cubemania.org
Hace muchos años, tal vez más de 25, tuve uno, o de pronto más de un cubo rubik en mis manos. Todos regalo de mis papás. Todos fueron movidos y sus piezas mezcladas formando 6 caras multicolores, sin solución alguna en mi cerebro ni en el de mis hermanos.
Decir “sin solución”, no es tan cierto. Sí existía, y consistía en despegar los stickers y volverlos a pegar formando 6 caras cada una con su propio color uniforme. Ni siquiera sabíamos que se podían sacar los dados que conforman el cubo y cambiarlos de posición.
Durante los años siguientes no volví a ver un cubo rubik diferente del que Cristopher Gardner, protagonista de la película “En busca de la felicidad” encarnado por Will Smith, arma en el taxi en sus múltiples viajes intentando encontrar la felicidad, o al menos algo de dinero para rehacer su vida.
Hace unos meses apareció en el Colegio Abraham Lincoln una demostración hecha por un niño de 13 años, quien armó el cubo en alrededor de un minuto y medio, obviamente, descrestando a todos los presentes. A partir de ese momento decidí aprender a armarlo; al igual, que lo hizo mucha gente, entre profesores y estudiantes.
Al día siguiente ya existía una considerable cantidad de cubos Rubik en el colegio; pronto se agotaron las existencias del cubo en Pepe Ganga, donde todos lo compramos; luego se agotaron las de Panamericana; y pronto apareció otra marca de cubo, llevada al colegio por “Genius”, entidad promotora de la agilidad mental de diversas maneras (cálculo mental, ábaco japonés, cubo Rubik, etc.); y pronto el colegio se vio inundado de cubos. El álbum del mundial fue llenado por profesores y estudiantes, pero pasó sin pena ni gloria, mientras el cubo causaba furor.
En los corredores, en las zonas verdes, en los salones (incluso en clase!) se escuchaba el típico “click” del giro de las caras del cubo. Por esa competitividad natural que tenemos los humanos, como herencia de nuestros ancestros, se comenzó a cronometrar el tiempo, y, cada vez, hacían un menor tiempo.
A los pocos días estábamos participando en el primer torneo de cubo Rubik, organizado por Genius. Logramos segundos y terceros puestos entre estudiantes con más tiempo de práctica y profesores más experimentados. Este evento aumentó aún más la fiebre del cubo. Incluso en los profesores que no les simpatizaba el cubo (creo que porque no tenían ni idea de cómo armarlo y les daba miedo intentar aprender) estaban de acuerdo, en que era preferible que armaran el cubo a que se idiotizaran en las diferentes aplicaciones del celular, el PSP, el iPod, el iPhone y demás tecnología que no siempre es buena.
Luego aparecieron cubos diferentes al típico 3x3x3; apareció el 2x2, el 4x4, el 5x5, el mirror, el cubo que no es cubo sino esfera, el cubo siamés, entre otros. Comenzaron a aparecer cubos 3x3x3 con mejor giro, más suaves, de movimiento rápido y buen corte de esquinas. Cada día aumentaba más la cantidad de gente adquiriendo y aprendiendo a armar el cubo; y luego, ganando destreza en su manejo.
Pronto aparecieron nuevos métodos para armarlo en menos pasos; lo cual implicaba nuevos movimientos y por tanto, más memorización de estos.
Datos empíricos, obtenidos sólo a través de la observación muestran que el curso 7A, en el que está la mayor cantidad de estudiantes que arman el cubo, que practican a diario y que aprenden nuevos métodos; además de aprender a armar diferentes tipos de cubos; es el que tiene mejor desempeño académico, al menos de los 3 séptimos; pero yo diría que de todo el bachillerato (de 5° a 11°).
De manera que sí debe haber beneficios para el aprendizaje.
El siguiente fragmento apoya lo anterior:
“New evidence reported recently in Scientific American:
• Thousands of new cells are generated in the adult brain every day, particularly in the hippo campus, a structure involved in learning and memory.
• Within a couple of weeks, most of those newborn neurons will die, unless the animal is challenged to learn something new. Learning—especially that involving a great deal of effort—can keep these new neurons alive.”
Nueva evidencia reportada recientemente en la revista Scientific American:
- Miles de nuevas células son generadas en el cerebro adulto cada día. Particularmente, en el hipocampo, una estructura involucrada en el aprendizaje y la memoria.
- En un par de semanas, la mayoría de estas recién nacidas neuronas morirán, a no ser que el animal sea enfrentado a aprender algo nuevo. El aprendizaje, especialmente, el que implica un gran esfuerzo, puede mantener estas neuronas vivas.
Este artículo apareció en la edición de marzo de 1981. No es posible conseguirla por ineternet, por lo que es necesario buscar la revista en alguna biblioteca para obtener el artículo. La portada es un cubo Rubik. Yo me pondré en la tarea de buscarla. Si la encuentro les cuento.
De hecho, estoy a punto de ofertar en e-Bay por ese ejemplar.
Volviendo al tema; esa misma revista ha publicado varios artículos más sobre el cubo. La bbcworld también ha listado algunos de los beneficios de esta actividad, como:
- mantener la mente sana en edad avanzada
- mantener la memoria a corto y largo plazo
- mejorar la coordinación ojo-mano
- aumentar la concentración
- evitar enfermedades mentales.
Cabe aclarar que la actividad que tuvo mayor efecto benéfico fue bailar.
Genius lista algunos otros beneficios:
- UBICACIÓN ESPACIAL (LATERALIDAD)
- COORDINACION MENTE-OJO-MANO
- INTERCONEXION HEMISFERIAL
- ATENCION Y CONCENTRACION
- PROCESOS SECUENCIALES
- TODAS LAS INTELIGENCIAS
- VELOCIDAD DE REACCION
- MEMORIA Y CREATIVIDAD
- ORDEN Y ORGANIZACIÓN
- INTUICION Y DEDUCCION
Y así es posible encontrar gran cantidad de beneficios listados y hallados en diferentes estudios científicos. De manera que puede escoger entre armar el cubo o bailar todos los días, aprendiendo nuevos pasos.
En este momento estamos preparándonos para el primer torneo interno de cubo; con miras a participar en el primer torneo oficial de cubo, a realizarse en agosto con jueces internacionales y con el reglamento oficial de la WCA (World Cube Asociation). Tras participar en esta competencia, todos quedaremos renqueados internacional y oficialmente.
Lástima que algunos ADULTOS que comenzaron su aprendizaje se quedaron por el camino. Ningún niño o joven se ha quedado atrás o ha renunciado. Todos han buscado y encontrado la manera de aprender a resolver el cubo. Por qué? Acaso los adultos ya tienen el cerebro fosilizado? Acaso les da miedo no poder? Así serán para otras cosas en la vida? Por qué prefieren excusarse en sus otras “ocupaciones” para decir que no tienen tiempo? Acaso no pasan horas frente al televisor perdiendo el tiempo? Acaso no pasan horas al lado de sus recién nacidos hijos, esperando a que se duerman? Y así ha de haber gran cantidad de momentos en los que podrían aprovechar para practicar.
Es irónico, y así se lo he hecho saber a algunos profesores que han dado un reporte de bajo rendimiento académico de algunos estudiantes; que hoy son los que están armando el cubo en menos de 2 minutos; a diferencia de esos mismos profesores que no han podido pasar del primer paso del método principiante, que es encontrar el centro blanco.
Como siempre también se valen otras actividades como los crucigramas, sudoku, soroban (ábaco japonés), rompecabezas, etc.; pero ninguno es tan divertido como el cubo. De hecho, yo creo que ninguno genera todas las habilidades que genera el cubo.
domingo, 6 de junio de 2010
SER CUMPLIDOS – SERES CUMPLIDOS
Conozco algunas personas, de hecho, algunas pocas personas, cumplidas. De esas que si dicen a las 4 p.m. a esa hora está sonando el timbre, o se las ve paradas en el sitio de encuentro, o están saliendo de su casa al llegar a recogerlas.
He podido disfrutar de su cumplimiento en muchas ocasiones, y a todas les agradezco el respeto mostrado por mi tiempo, y por ende, por el tiempo de los demás. Espero que nunca cambien eso, ya que para algunas personas, es muy aburridor, así lo disimulemos, que los demás no estén listos a tiempo, o no cumplan con la hora acordada.
Los del otro bando, el de los incumplidos; son a quienes no les importa el tiempo de los demás; ni los preparativos que hacen los demás para cumplir con la cita. Ellos, por alguna extraña razón se creen con el derecho de demorarse todo el tiempo necesario para estar listos, y los demás, simplemente, deben aguantarse, o no salir con ellos. Seguramente, sea una cuestión de super-ego.
Es un poco absurdo tener que decirles a esas personas que se debe salir a las 10 a.m., mientras sabemos que estaría perfecto salir a las 11 a.m. Pero si no hace así, fijo se llega tarde al evento que sea.
No entiendo por qué les es tan difícil programar su horario, su día, la hora de acostarse a dormir, la de levantarse, poner uno o varios despertadores, alarmas y recordatorios en toda la variedad de apararos electrónicos que inundan nuestra vida hoy; de manera que, sabiendo todo lo que se demoran en alistarse, puedan empezar a tiempo y cumplir, es decir, respetar el tiempo de los demás.
No entiendo por qué, simplemente, lo “solucionan” con un “sigue, siéntate, ponte cómodo, estás en tu casa, quieres algo de tomar mientras me termino de arreglar?”. Y eso cuando la cita es en la casa del incumplido, y no toca esperar parado en una calle, o sentando en un andén, o sentado en una banca de parque, de andén o de centro comercial. Una situación intermedia es cuando se pude esperar dentro del carro; que al menos es más cómodo que la calle o la banca, y suele tener música; pero sigue sin ser divertido.
Ser cumplidos, es decirle al otro lo importante que él es para nosotros; que lo apreciamos, y respetamos su tiempo, y que nos gustaría que hiciera lo mismo con nosotros. Ser cumplidos implica tener en mente, o en el cronograma de actividades ese encuentro; y eso implica ajustar el resto de cosas que hacemos a diario para lograr cumplir; más teniendo en cuenta, los trancones, las demoras del transporte público, la lluvia, las inundaciones, las obras en la vías, etc, etc, etc; y ser capaz de salir a tiempo y sortear los imprevistos para llegar a tiempo.
Existen casos en los que definitivamente no se puede llegar, o no se puede llegar a tiempo; pero si antes se podía avisar desde un teléfono público, o desde el de la casa, o desde uno prestado; o mediante un mensaje de beeper; con mayor razón, hoy se puede avisar desde, y al celular; para que el otro sepa, y aproveche el tiempo mejor que esperando sin hacer nada útil; o para que no salga aún al sitio de encuentro.
Es el colmo que el cumplido sea el que tenga que llamar al que no llega para averiguar qué pasó, y si va en camino, y si va a llegar en algún momento. Debería ser el que va tarde quien llame y avise.
Ser incumplido, no sólo es llegar tarde, o estar listo tarde; sino, como su nombre lo dice, no cumplir. No cumplir con las promesas, o con lo planeado. No cumplir con “te llamo en 10 minutos” (y el otro, espere y espere los 10 minutos más largos de la vida), o “llego en 5 minutos” (también eternos), o “te llamo el viernes al medio día, y cuadramos para encontrarnos por la tarde” (nunca se supo qué viernes, de qué año…), o “para mañana por la noche fijo, te llamo por la tarde y te confirmo la hora (…).
Si eso hace parte de ser incumplido, es lo mismo ya descrito; falta de respeto con el tiempo de los demás; pero si es una forma de aplazar los encuentros, entonces el problema es de falta de sinceridad, al no ser capaz de decir “la verdad no quiero salir contigo”; pero creo que este caso no aplica mucho, porque esas personas incumplidas por naturaleza suelen ser los bien conocidos amigos de toda la vida; que sabemos que no van a llegar, a pesar de haber dicho lo contrario, o van a llegar tarde, o, en el peor de los casos, ni van a llegar, ni van a contestar el teléfono cuando los cumplidos los llamen; y cuando se re-encuentren, estarán llenos de excusas para justificar su no-llegada, su no-contestada de teléfono; y finalmente, dirán “para la próxima, fijo cuente conmigo”. En esa próxima, adivinen qué! Tampoco aparecen, tampoco contestan; y luego, excusas en grandes cantidades: que la pila del celular, que el volumen, que el hijo, que la esposa, que la mamá, que el perro, que el gato, que el sueño, que… que… que…
Finalmente, esas personas incumplidas, ya no son invitadas más por los cumplidos, porque, aunque no lo crean, como si fuera poco el irrespeto al tiempo de los demás, generan inconvenientes en la vida, como que a todos se les hace tarde, como que todos quedan como incumplidos, como que se les atrasan el resto de actividades del día, como que ahora hay que correr más para alcanzar a hacer todo, como que hay que “ponerle” minutos al celular para llamar a ver qué paso, etc.
El cuento de que las mujeres son incumplidas por naturaleza, es una más de las tantas excusas de las mujeres incumplidas; y no es cierta. Conozco varias mujeres cumplidas; la mayoría de ellas se maquillan, se peinan, se alisan el pelo, o se lo encrespan, se depilan, se cambian de ropa 10 veces antes de salir y todo eso que hacen; y logran llegar a tiempo o estar listas a tiempo.
Las demás deberían tomar un cursito con las primeras, para aprender cómo se logra cumplir con todo eso; además de dejar la casa arreglada, y ser cumplidas.
Para los que dicen “si quieren salir conmigo, pues que me esperen”; estoy seguro, que muchos no están dispuestos a esperar, y menos sabiendo que así será el resto de la vida; pero también habrá quienes sí estén dispuestos a esperar el tiempo que sea necesario.
Ojalá quienes esperan, después no sufran un regaño por no estar listos a tiempo, el único día que no lo lograron; porque, para completar, los incumplidos suelen ser los que más acosan cuando se trata de salir a tiempo a algún evento de su interés.
Relojes venden por doquier, despertadores, agendas electrónicas, Palms, Ipods, Iphones, Celulares, tableros, etc. Las empresas de taxis tienen servicio de despertador; y hay miles de formas más de recordar los compromisos. La otra parte es comenzar a trabajar en calcular bien el tiempo que se necesita para estar listo y desplazarse hasta el sitio de encuentro. La práctica hace al maestro.
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